martes, 21 de junio de 2011

Logoterapia




“Explicaré a continuación por qué empleé el término ‘logoterapia’ para definir mi teoría. Logos es una palabra griega que equivale a ‘sentido’, ‘significado’ o ‘propósito’. La logoterapia o, como muchos autores la han llamado, ‘la tercera escuela vienesa de psicoterapia’, se centra en el significado de la existencia humana, así como en la búsqueda de dicho sentido por parte del hombre. De acuerdo con la logoterapia, la primera fuerza motivante del hombre es la lucha por encontrarle un sentido a su propia vida. Por eso hablo yo de voluntad de sentido, en contraste con el principio de placer (o, como también podríamos denominarlo, la voluntad de placer) en que se centra el psicoanálisis freudiano, y en contraste con la voluntad de poder que enfatiza la psicología de Adler.

La búsqueda por parte del hombre del sentido de la vida constituye una fuerza primaria y no una ‘racionalización secundaria’ de sus impulsos instintivos. Este sentido es único y específico en cuanto es uno mismo y uno solo quien tiene que encontrarlo; únicamente así logra alcanzar el hombre un significado que satisfaga su propia voluntad de sentido.”
(Viktor E. Frankl. 'El hombre en busca de sentido')

2 comentarios:

Iñaki Murgiondo dijo...

.."únicamente así logra alcanzar el hombre un significado que satisfaga su propia voluntad de sentido”

¿es científico asumir que se alcanza el significado y que la voluntad de sentido se puede satisfacer?

¿o no puede ser que tanto como la voluntad de poder y de placer, la voluntad de sentido nunca se sacia salvo con el autoengaño conformista?

Si fuera así sólo el vacío o la búsqueda continua serían lúcidas.

A mal a mal - buscar es más divertido.

Javier Aranguren dijo...

Correcto. la voluntad de sentido, la necesidad de encontrar sentido a los diferentes momentos de la vida, incluso la necesidad de encontrarle un sentido último a la propia viada, ese es el motor que nos puede mover o paralizar. Cómo bien dices, es el vacío o la búsqueda continua.
La vida nos pone constantemente ante situaciones que nos interrogan, que nos preguntan "...y esto, para qué?...". Tenemos la responsabilidad de dar respuestas, de "buscar" respuestas.