jueves, 17 de marzo de 2011

Vacío Existencial

Hoy ya no sufre el hombre tanto, como en tiempos de Freud, bajo la frustración sexual, sino bajo la frustración existencial. Hoy tampoco oprime tanto, como en época de Adler, el complejo de inferioridad, sino más bien un complejo de falta de sentido, acompañado de un vacío existencial.

A diferencia de los animales, al hombre no le dicta ningún instinto lo que “tiene que ser”, y a diferencia de los hombres de épocas pasadas, tampoco tiene tradiciones que le enseñen lo que ”debe ser”. Al parecer, ya ni siquiera sabe lo que “quiere ser”. Y ocurre así que o bien sólo quiere lo que otros hacen, y entonces nos hallamos ante el “conformismo”, o bien sólo hace lo que los otros quieren de él, y entonces nos enfrentamos con el “totalitarismo”.

Conformismo y Totalitarismo, son los dos embriones donde se genera el vacío existencial. No se trata solamente de opciones políticas. Partidos, gobiernos. Nos encontramos con estas formas de situarnos ante la vida, con la moda, en la familia con nuestros hijos, parejas, padres.

Nosotros decidimos que queremos en nuestras vidas y somos responsables de que colores vestirla.